Como ya informó este periódico en su edición en papel, los miembros de la Junta de Gobierno del Consorcio Valencia Interior han visitado recientemente las obras de construcción del complejo de valorización y eliminación de residuos domésticos en Caudete de las Fuentes al que se destinarán en el futuro los residuos que se generen en la comarca de La Hoya de Buñol-Chiva.
La visita ha sido dirigida por el presidente del Consorcio, Javier Cervera, y por el alcalde de Caudete de las Fuentes. Junto a ellos han asistido el Director General de Calidad Ambiental, Vicente Tejedo, y la Subdirectora de Calidad Ambiental, Carmen de Rosa, ademáis de numerosos alcaldes y concejales del Consorcio.
Como se ha informado, dicha instalación tendrá una capacidad neta de 1.483.087 metros cúbicos, suficiente para albergar los rechazos de valorización de la zona durante 20 años.
El complejo dispondrá de una planta donde se separarán las distintas fracciones aprovechables de los residuos que llegan al contenedor común, con una capacidad de tratamiento de 40.000 toneladas anuales de basura, y un vertedero donde depositar de forma segura los rechazos de la planta contigua. A este vertedero irán además los rechazos de la segunda planta de tratamiento de residuos del Consorcio, ubicada en término municipal de Llíria y con capacidad para tratar 80.000 toneladas anuales de residuos domésticos.
El vertedero consta de tres espacios o celdas en los que se depositarán los rechazos. Las primeras dos celdas, con una capacidad conjunta de 773.267 metros cúbicos de residuos, se estima que darán servicio al Consorcio durante 12 años, albergando unas 620.000 toneladas de rechazos provenientes de las plantas de Llíria y Caudete.
Asimismo, el programa de vigilancia ambiental del vertedero incluye una red de 9 pozos para monitorizar regularmente la calidad del agua subterránea en el entorno de la instalación y un novedoso sistema de detección automática de fugas, que lo convierten en el depósito de rechazos de la Comunitat que puede acreditar una mayor garantía de seguridad ambiental.
En estos momentos las obras avanzan con las tareas de colocación de la lámina impermeable que recubre el vaso de vertido de la primera celda. Una vez realizado el movimiento de las arcillas impermeables que conforman el vaso, se disponen las grandes láminas de polietileno de 2 mm de espesor en franjas paralelas y se unen con una soldadura térmica, cuya estanqueidad se comprueba centímetro a centímetro. El presupuesto de inversión en la primera fase del vertedero hasta su puesta en marcha, prevista al final del verano, es de 3.267.666,53 euros.
La inversión total durante su vida útil está previsto que sea de 10.877.235,32 euros.
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